Ambas son piedras naturales ideales para utilizar tanto en construcción como en decoración.
1. Durabilidad y dureza. El granito es un material muy duradero, con gran resistencia al calor y a posibles daños o arañazos. Además, suele mantener su brillo natural por mucho más tiempo frente al mármol.
2. Diseño natural. La diferencia en este caso radica en el estilo y el diseño que busquemos para cada uso. El granito, tiene un aspecto más pecoso, repleto de pequeñas piedrecitas entrometidas como feldespato, mica y anfíbol. Por otro lado, el mármol suele ser un material mucho más limpio y liso, con vetas alargadas que dibujan un líneas onduladas sobre la piedra.
3. Uso y aplicaciones. el mármol se utiliza mucho más para revestimientos y pavimentos, mientras que el granito suele utilizarse para encimeras de cocina y baños. Aunque ambos aportan elegancia, las vetas del mármol ofrecen una aire sofisticado y exclusivo a los ambientes más vanguardistas.
4. Mantenimiento. Tanto el mármol como el granito tienen un fácil mantenimiento. Eso sí, se debe de extremar la precaución con el uso de químicos en piedras como el mármol, ya que podemos estropearlas, eliminando su brillo natural o creando manchas irreversibles.
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