Cuando pensamos en ladrillo, lo primero que se nos viene a la mente es un bloque color cobrizo, y si, ese es un tipo de ladrillo, pero existen muchos tipos y cada uno sirve funciones específicas.
Ladrillo macizo: Su superficie tiene menos del 10% perforado, se utiliza para la construcción de muros que necesitan una mayor capacidad de carga.
Ladrillo cocido de arcilla: Este ladrillo es hecho de forma artesanal, no tiene perforaciones, no es apto para viviendas ya que no tiene mucha fuerza.
Ladrillo hueco: Contiene perforaciones horizontales en el canto, esto reduce su peso pero no su resistencia. Es utilizado en muros no portantes como fachadas o cerramientos.
Ladrillo refractario: Estos ladrillos están hechos para resistir altas temperaturas, por lo que son ideales para chimeneas, hornos y calderas.
Ladrillo Cara Vista: Este ladrillo es muy estético, por su superficie rugosa y sin poros, lo que es resistente al agua y bajas temperaturas, ideal para fachadas.
Ladrillo Borgoña: Hay de 3 o 6 orificios, se utiliza para decoración y para la construcción de paredes y techos.
Ladrillo clínker o gresificado: Este tipo de ladrillo es cocido a altas temperaturas, lo que aumenta su densidad y disminuye su absorción de agua. Hay terminado gres, esmaltado y rústico.
Ladrillo decorativo: Para interiores y exteriores, está diseñado para quedar a la vista, tiene una gran resistencia y durabilidad.
Ladrillo de Tejar o Manual: Simulan a los ladrillos de fabricación artesanal, tienen una apariencia tosca y rugosa, ideal para ornamentación.
Ladrillo de Arcilla Tradicional: Es resistente al fuego y a condiciones climáticas extremas ideal para la construcción.
Ladrillo perforado de 18 huecos: Ideal para la construcción de muros, ya que son ligeros y con alta resistencia estructural.
Arquitectura | Interiorismo | Remodelacion
Blog by Grupo Gimetric
Suscríbete al blog y comparte tus post favoritos en tus redes sociales!💗
REDES SOCIALES
Encuéntranos en:
Facebook | Instagram | Pinterest | Youtube| Tiktok
Fuente de imágenes: Pinterest